En vísperas del 1 de Mayo, la central obrera exigió «la inclusión de los desposeídos por la pobreza y la integración de los desclasados por la desocupación». Además reivindicó la unidad del movimiento obrero contra las políticas de ajuste de la alianza gobernante.
El Consejo Directivo de la Confederación General del Trabajo recordó, a través de un comunicado, que el trabajo «hace digno e importante a los hombres y mujeres del mundo» y que «la Justicia Social se logra con más y mejor trabajo».
En la víspera del 1 de Mayo, la central obrera sostuvo que «este gran ordenador social es la más importante e imprescindible herramienta para que se produzca la ansiada movilidad social. Para que la pobreza estructural deje de serlo para darle paso a una equidad que hoy no tienen los que menos tienen. Para que la Educación deje de ser un bien preciado para transformarse en el derecho natural que nuestra Constitución pregona y manda. Para que ser asalariado deje de ser un privilegio. Para que llegar a fin de mes no dependa de techos paritarios».
«En este 1 de Mayo nos une -continúa el comunicado-, como la historia es testigo, la demanda por mejores y más derechos que cobijen a la fuerza del trabajo», el reclamo de «un salario digno y la inclusión de los desposeídos por la pobreza».
Entre su consignas, la organización sindical abogó «por la integración de los desclasados por la desocupación», y reivindicó «la lucha contra aquellos que creen que el ajuste debe ser soportados por quienes solo poseen la fuerza del trabajo contra el capital que oprime y dispone».
Por último, la central obrera hizo suyo «el reclamo de los trabajadores para que la unidad del movimiento obrero sea la fuerza solidaria con que enfrentar a las políticas de ajuste económico y laboral». (pagina12)