En el peronismo cordobés celebraron el guiño a favor del candidato de Unión por la Patria.
Liliana Montero, quien ocupará un lugar importante en el futuro gabinete de Martín Llaryora, generó un primer gesto de apoyo hacia la candidatura de Sergio Massa: viajó a Buenos Aires para mostrarse junto a Malena en una foto de alta simbología en el peronismo cordobés.
Montero no es peronista, sino una radical alfonsinista que lidera su propio partido, «Córdoba Futura», de conformación progresista, pero integra la gestión municipal de Llaryora y pasará a ocupar una silla importante en el próximo gobierno provincial.
Con el gesto, que se descuenta tuvo el visto bueno de Llaryora, Montero dejó en claro que hay un «sentido de pertenencia» respecto del rol que debe tener el Estado.
Aunque la foto es «cuidada» (no aparece Massa, sino Malena, y no hay ningún símbolo de la campaña presidencial), el gesto es claro y se expandió por el peronismo cordobés, que lo tomó como una primera señal de quiebre de la prescindencia.
Sin embargo, Llaryora continúa en el exterior y no ha dado ninguna señal pública concreta respeto de una ruptura de la «prescindencia» en el balotaje. La foto de su funcionaria con Malena es hasta ahora el único «gesto».
En el entorno de Montero aseguraron que la foto con Galmarini es una señal a su espacio político, no hacia el peronismo cordobés. «Liliana generó un gesto a ‘Córdoba Futura’, donde hay radicales alfonsinistas, socialistas, desencantados del peronismo y ex Barrio de Pie, una fuerza progresista: el sentido político es que ante el escenario de balotaje nos sentimos cerca de la propuesta de Massa», indicó un colaborador de la actual secretaria de Salud Comuitaria de Llaryora.
Aunque Montero no salió a pedir el voto por Massa, sino que eligió posar con «una militante como lo es Malena», la lectura política en el peronismo capitalino es que Llaryora «escuchó» a la militancia peronista que por lo bajo ya trabaja para la candidatura presidencial del ministro de Economía. (lpo)