La convocatoria tuvo varios puntos de encuentro en toda la Ciudad y giró en torno a la legalización del aborto que se tratará esta semana al Congreso.
El Día de la Mujer mantuvo el Congreso rodeado por dos jornadas. Con Hipólito Yrigoyen cortada desde el sábado por la noche, frente a la plaza se armó un escenario en el que confluyeron mujeres sin parar el domingo y el lunes. Tras el tradicional 8M, este lunes fue el Paro de Mujeres con una marcha de la Plaza de Mayo hasta el Congreso con la consigna “La deuda es con nosotras y con nosotres, ni con el FMI ni con las Iglesias”.
En la previa al tratamiento del nuevo proyecto de ley de Legalización del Aborto que Alberto Fernández prometió que llegaría esta semana al Congreso, en la marcha se impuso el pañuelo verde en las muñecas, cuellos y mochilas de las más jóvenes de las asistentes, que una vez más fueron las más numerosas.
También cuantiosos se repitieron los pañuelos violetas, emblema del “Ni una menos”, y los naranjas que piden por la separación de la Iglesia y el Estado -con una gran bandera también sobre Callao a pocos metros de Rivadavia-. Las rejas de la plaza de los Dos Congresos habían sido ya ocupadas con las banderas del MST, el PTS y el Polo Obrero.
La convocatoria tuvo pancartas partidarias y columnas con las militantes de cada partido, pero sobre todo de chicas que se agrupaban con sus compañeras de secundario. En medio, un montón de mujeres interpeladas por la consigna, pero sin identificación partidaria con alguna prenda de vestir verde o violeta a falta de pañuelo, diferencia del domingo que fueron más madres con sus hijas más chicas. Poco después de las 15, la plaza frente al Congreso ya estaba a medio colmar. Para las 17 las calles laterales rebasaban.
Una de las columnas más voluminosas se agrupó detrás de una bandera verde que abordaba todos los carriles de Avenida de Mayo con la leyenda “Ni una muerte más por aborto clandestino” encabezada por las referentes de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
La marcha se vio opacada por la confirmación del femicidio de Fátima Acevedo el mismo 8 de marzo por la noche, una joven de Paraná que había denunciado a su ex pareja en reiteradas ocasiones por amenazas. Se trata de 68º femicidio en lo que va del año.
“En 2020 hay más femicidios que días”, “Marzo lleva más femiciodios que días”, rezaban en este sentido dos de las pancartas. No es casual. De un femicidio cada 24 horas que se denunciaba en la primera marcha del Ni una menos, las estadísticas no ceden.
“Paren de matarnos”, “Basta de femicidios”, “El Estado no me cuida, mis hermanas sí”, “A mí también me gustan las mujeres y no las acoso”, fueron algunos de los carteles que levantaban las manifestantes en contra de la violencia de género que colmaron las diagonales alrededor de la Plaza Mayo y luego se desplazaron hasta el escenario frente a las escalinatas Congreso donde a las 19 horas se leyó el documento colectivo del Paro de Mujeres. (LPO)