De este modo, el índice marcó la primera ruptura tras un crecimiento de seis meses consecutivos. La devaluación del peso, clave.
Luego de crecer por seis trimestres consecutivos, el volumen de venta de electrodomésticos quebró su tendencia y marcó en el tercer trimestre de 2018 una caída del 22% con respecto al mismo periodo del 2017.
Según los datos publicados por el INDEC, la facturación (en términos nominales) de los centros de compras especializados creció 5% interanual (i.a.) en dicho periodo, pero los precios del rubro, medido por el IPC-GBA Ecolatina, se incrementaron en promedio 38% i.a., lo que deja la facturación real claramente en terreno negativo (-22% i.a.).
En cuanto a las razones de la caída, la consultora Ecolatina destaca que la primera es que en el tercer trimestre de 2018 ya no se encuentra presente el “efecto mundialista”, motor de crecimiento de las ventas de televisores en la primera parte del 2018.
En esta línea, hasta junio la facturación en términos reales del rubro televisores, video y fotografía marcaba un aumento de 75% ., mientras que el resto de los rubros en conjunto exhibía un incremento de sólo 6,4% i.a. En el tercer trimestre, la caída fue generalizada: el volumen de los primeros cayó 32% i.a., mientras que los segundos retrocedieron 20% i.a.
La segunda razón, es el nuevo contexto macroeconómico. La fuerte devaluación del Peso argentino y el encarecimiento –inclusive la desaparición- del crédito, hicieron que se desplome la demanda de electrodomésticos.
En este sentido, el salto en cotización del dólar, redujo el poder adquisitivo en moneda dura, desalentando la compra de bienes durables, pero también aceleró la inflación, deteriorando al mismo tiempo el poder adquisitivo en pesos.
Particularmente, en septiembre, cuando el dólar perforó los 40AR$ y la incertidumbre reinaba en los mercados, la facturación del sector experimentó una caída nominal del 1,8% i.a., siendo que los precios del sector treparon más del 50% i.a.
De manera adicional, tras el salto cambiario, los electrodomésticos y artículos del hogar se encarecieron respecto al resto de bienes de la economía: en el bimestre septiembre-octubre el Nivel General de Precios creció 12,7%, mientras que los precios del rubro lo hicieron 24%.
Las perspectivas para el sector no son alentadoras. Esperamos que la caída en la venta de electrodomésticos se profundice en el último trimestre de 2018 y, que las mismas no muestren mejoras significativas durante 2019.
Los salarios en pesos exhibirían crecimiento en términos reales recién a mediados del año que viene y la mejora no sería suficiente para compensar lo perdido durante 2018. Por lo cual, frente a la necesidad de recomponer consumo de bienes considerados de mayor necesidad que los bienes durables, la compra de electrodomésticos seguiría relegada en 2019.
Asimismo, aunque se prevé una baja significativa de la tasa de interés, la misma continuará en niveles elevados, dificultando el acceso al financiamiento, herramienta clave del sector.
Por último, no esperamos un abaratamiento relativo de los electrodomésticos que impulse las ventas, dado que prevemos que el tipo de cambio se mueva en línea con la inflación (el precio de los electrodomésticos está atado al dólar debido al alto componente importado del sector).
De esta forma, hasta tanto la economía muestre mayor estabilidad, el costo de financiamiento se reduzca a niveles accesibles y los salarios se fortalezcan, las ventas del sector no mostrarían una recuperación. (ámbito.com)