Según supo FEDERAL AL DÍA, la mujer a la que mantuvo cautiva en su domicilio del barrio Itatí, habría estado en esa condición desde el pasado 31 de diciembre. Una tía visitó la casa del joven, cuando este no se encontraba, y pudo constatar que estaba encerrada con candado en una de las habitaciones. Radicó la denuncia policial, y este miércoles luego de un allanamiento lograron liberarla y detener al implicado en el delito de privación ilegítima de la libertad.
Por estas horas se trataba de establecer si Gisela, de 22 años de edad, el pasado 31 de diciembre acudió por su propia voluntad a la vivienda de Daniel, de la misma edad, o si fue llevada allí por la fuerza. Ambos habían sido pareja, hasta que el joven fue denunciado por violencia de género, y la justicia determinó una restricción perimetral por 90 días para evitar que la molestara.
Según habría relatado una de sus tías, le causó sorpresa que la joven no la visitara desde el pasado 31 de diciembre, cuando llegó para saludarla por las festividades por la llegada de un nuevo año, por lo que comenzó a preguntar por ella sin obtener resultado; hasta que en la jornada anterior se acercó hasta la casa de Daniel, ubicada sobre Seghezzo entre Itatí y Antonio Flores, y este no se encontraba, pero pudo dialogar puerta de por medio con su sobrina, a quien mantenían bajo amenazas encerrada con candado.
Esto llevó a que acudiera a la policía para radicar la denuncia, trasladándose los efectivos de la fuerza hacia la vivienda del barrio Itatí, donde fueron atendidos por Daniel, quien dijo no saber nada sobre el paradero de la joven; debiendo la justicia ordenar un allanamiento a la vivienda, encontrándose allí a la mujer; la que fue hospitalizada, mientras que el joven detenido y alojado en la Jefatura Departamental de Policía.
A Gisela, al ser revisada por los médicos, se le observo lesiones de diferente estado de evolución, en las mejillas, heridas compatibles con rasguños, y otras varias excoriaciones. (Federal al Día)