Los servicios meteorológicos pronostican frío extremo para este fin de semana, con temperaturas de 37 grados bajo cero. La ola polar, por la que ya murieron 12 personas, provocó que las cataratas del Niágara se congelaran y que nevara en la Florida después de cuarenta años.
El llamado «Ciclón Bomba», la ola polar de frío que cubre parte de Estados Unidos y que ya dejó 12 muertos, llevará las temperaturas a 37 grados bajo cero hacia el final de la semana, en el noreste del país, por lo que hará más frío que en el planeta Marte.
Según información del Observatorio Mount Washington de Nueva Hampshire, la temperatura «caerá desde la noche de este viernes hacia el amanecer del sábado a –37°. En el último control, la temperatura alta en Marte era –18°».
La ola de frío bate récords históricos. “La masa de aire ártico continuará fuerte sobre los dos tercios orientales del país hasta el final de la semana”, confirmaron desde el Servicio Nacional de Meteorología (NWS, por sus siglas en inglés), que además indicaron que se registrarán “temperaturas muy frías y vientos gélidos peligrosos” en esta zona.
La ciclogénesis masiva, tal es el nombre científico de área de baja presión con rápido declive, dejará entre 15 y 30 centímetros de nieve en Nueva Inglaterra con ráfagas de un huracán, de 64 a 96 kilómetros por hora. Los estados de la costa este, desde Maine hasta Florida ya han declarado el alerta.
La CNN confirmó al menos 12 muertos durante la última semana. En Wisconsin hubo seis, en Texas cuatro, dos de ellos en situación de calle; uno en Dakota del Norte y otro en Missouri. La situación es tan atípica que ya partieron a las zonas afectadas los aviones del Servicio Meteorológico Nacional que se emplean ante la emergencia de huracanes para recopilar datos y refinar el pronóstico, destacó el diario The Washington Post.
El fenómeno meteorológico por el que la presión baja al menos 24 milibares en 24 horas ya provocó que las cataratas del Niágara se congelaran. Las escuelas del sureste de Estados Unidos cerraron ante la fuerte tormenta de nieve y, hasta la cálida Florida, se cubrió de un manto blanco por primera vez en cuatro décadas.
La temperatura en Nueva York y Filadelfia bajarán a –16° este fin de semana y en la ciudad de Boston alcanzará los –21°. En la Gran Manzana, la nieve llegará a cubrir entre 10 y 15 centímetros y los trabajadores de saneamiento se están preparando para desplegar 2200 quitanieves.
El gobernador de Florida, Rick Scott, alertó a prepararse para enfrentar «condiciones climáticas extremadamente frías, incluyendo posibles acumulaciones de nieve, aguanieve o hielo». Allí, ya cerraron las dos principales universidades, suspendieron los parques acuáticos en Orlando y se abrieron una docena de refugios de emergencia.
Por su parte, el gobernador de Georgia, Nathan Deal, declaró el estado de emergencia para 28 condados costeros y uno de sus aeropuertos principales, el de Savannah/Hilton Head, que por esta época del año suele tener muchos turistas, fue cerrado ayer.
La tormenta masiva que se esperaba el jueves comenzó hace dos días en el Golfo de México, primero golpeando la península de Florida. Hubo cientos de vuelos cancelados, escuelas y negocios clausurados y despertó temores de inundaciones costeras y cortes de energía. (pagina12)