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MILEI ANTE LA INFLACIÓN: EL IMPACTO DE LOS ALIMENTOS EN LOS BOLSILLOS

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Pese a la desaceleración general, los precios de frutas y verduras siguen escalando, afectando el poder adquisitivo de los argentinos.

Mientras el Gobierno de Javier Milei sigue tirando fruta con los números e intenta hacer creerle a los argentinos que su plan económico está funcionando, los números de las encuestas y sondeos demuestran que pese a la enorme caída del poder adquisitivo de los salarios y el desplome del consumo, la inflación sigue siendo un problema que acosa mes a mes a los laburantes, sobre todo en el rubro alimenticio.

Lo cierto es que entre pitos y flautas, con el escándalo de Alberto Fernández y Fabiola Yañez tomando la centralidad en los medios hegemónicos, hemos llegado a casi la mitad de agosto, lo que significa que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer el Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente a julio este miércoles.

En los pasillos de La Rosada son optimistas y se espera que el dato muestre una desaceleración respecto a la medición de junio, situándose alrededor del 4 por ciento y retomando una tendencia a la baja tras el aumento del mes anterior. Después de romper una racha de cinco meses de desaceleración con un incremento del 4,6 en junio frente al 4,2 por ciento registrado anteriormente, se espera que el índice inflacionario haya mostrado una merma en el ritmo de aumento de precios en julio.

Sin embargo, un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) advirtió por una suba desmedida para las frutas y verduras, a pesar de la desaceleración inflacionaria mencionada anteriormente. En conjunto, la variación interanual de julio fue de 349,7 por ciento. El tomate con 935,9 tuvo la mayor variación interanual. «La variación acumulada en 2024 del segmento es 270,4, muy superior al 79,8 del Índice de Precios al Consumidor de junio 2024», sostiene el documento.

Esto es relevante, pues las hortalizas y las frutas representan buena parte del consumo de la canasta de las y los argentinos. La incidencia de las primeras en el Índice de Precios al Consumidor (IPCINDEC) alcanza el 2,2 por ciento en la región Gran Buenos Aires y alcanza hasta 3,6 en las regiones noreste y noroeste del país. Por su parte, la incidencia de las frutas es de 1,3 en la región Gran Buenos Aires y 1,5 en el noreste y noroeste del país.

Claramente los números están indicando que el consumo a la baja es lo que está dando “resultado” en el dibujo de los números inflacionarios, puesto que, en los rubros más esenciales, en los que la gente no puede dejar de comprar, los precios no se detienen y siguen escalando de forma estrepitosa. Los datos de inflación decreciente lo único que indican es que la población está achicando los gastos en las áreas que ya no puede seguir manteniendo, y por ende, hay una desaceleración en esos rubros.

Así, «la variación acumulada en 2024 del segmento es 270,4 por ciento, muy superior al 79,8 del Índice de Precios al Consumidor de junio 2024», sostiene el documento.

El informe asegura que las causas de los aumentos de precio en el segmento VTL fueron varias, pero las heladas que hubo en todo el país golpearon a algunos de los productos más vendidos. La papa aumentó en los últimos días de forma considerable y el kilo superó el precio relativo de varios productos de la economía.

«Hubo heladas a mediados de julio en Córdoba, Tucumán y Catamarca», señaló un reconocido mayorista para marcar las razones que hicieron que mermara la producción y con ello que se diera una suba considerable cuando se distribuía en todas las provincias y citado en el estudio.

En el mes de julio, el segmento de las 6 especies más vendidas en el MCBA registró un aumento de 33,4 en el promedio ponderado, provocando un aumento de 36,4 por ciento en el segmento VTL del IPC respecto al mes pasado. De esta manera, el ponderador de la división Alimentos y Bebidas no alcohólicas, que es del 2,2 en el IPC, mostraría un aumento de 0,8 en los precios del mes de julio.

El segmento de las cuatro frutas más comercializadas en el MCBA muestra un aumento de 3,1 por ciento en el GBA respecto a junio 2024, lo que permite proyectar una disminución en el precio del segmento frutas del IPC de 5,1. Este impacta en el orden de 1,3 porcentual del ponderador de la división de Alimentos del IPC. «El impacto del rubro en el IPC de julio podría mantenerse en el mismo nivel del mes anterior», asegura el documento.

De acuerdo con el estudio, todas las especies incrementaron sus precios. La cebolla lo hizo en 64,4 por ciento, la papa en 49,6, la lechuga en 44,2, la batata en 13,7, el tomate en 13,3 y el zapallo en 4,3. La variación interanual del segmento fue de 349,7. El tomate exhibió la mayor variación interanual 935,9 por ciento.

Frutas: durante el mes de julio solo la banana aumentó su precio (16,3 por ciento). Los demás productos bajaron sus valores: la naranja en 9,7, el limón en 5,8 y la manzana en 0,4. La banana tuvo la mayor variación interanual (322,8 por ciento) y también la mayor variación acumulada en 2024 (142,4).

La variación acumulada 2024 de los segmentos es la siguiente: VTL 270,4 por ciento y Frutas 123,3.

El aumento del precio de la cebolla responde a las heladas en Córdoba, Tucumán y Catamarca, debiendo abastecer el mercado con la importación de cebolla de Brasil. Por otro lado, el incremento de los costos de energía impacta negativamente en los productores, abandonando los cultivos antes de cosechar.

El aumento en el precio de la banana se debe a condiciones climáticas adversas y al cierre del paso fronterizo de Mendoza, que ha impedido su importación. La variación de precios del limón está relacionada con una caída en la demanda internacional de cítricos. Aunque en julio se observó una disminución en los precios de las naranjas, las heladas en la zona norte de la provincia de Buenos Aires redujeron la producción al menos 30%, por lo que se prevé un aumento de precios en los próximos meses.

Durante el mes de julio se ve una notable dispersión de precios en supermercados. La lechuga encabeza este ranking, con 163,2 por ciento, mientras que la batata, con 27,4, es la que menos dispersión de precios presenta. Durante el mes de julio vuelve a aumentar la brecha de precios entre el MCBA y los Supermercados en 9,4 p.p. respecto de junio. En hortalizas, sólo el tomate incrementó la brecha de precios entre MCBA y supermercados.
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