Durante el fin de semana, la tradicional celebración recibió a una multitud en el anfiteatro Francisco Ramírez. De la fiesta fueron parte Rudi Flores, Diego Gutiérrez, grupo Irundy y Antonio Tarragó Ros, entre otros.
Se apagaron las luces del 49° Festival Nacional del Chamamé en Federal, Entre Ríos, que luego de tres emotivas jornadas, anunció el inicio de la edición «dorada» por sus 50 años. Para cada noche, propusieron una destacada grilla en la cual integraron numerosos artistas correntinos.
Una multitud cubrió cada noche el predio del anfiteatro Francisco Ramírez para disfrutar de un festival con mucha identidad e historia. El escenario Ernesto Montiel fue testigo de la pasión por el chamamé que genera cada festival, que entre sus principales músicos, se destacaron varios artistas correntinos.
El evento contó con la visita del director de la Fiesta Nacional del Chamamé, Eduardo Sívori, quien destacó «el gran sentido de pertenencia que tiene el pueblo de Federal por el chamamé». Esta visita protocolar sirvió, además, para realizar acciones en conjuntas entre ambas celebraciones íconos del género musical.
Para ello, Sívori se reunió con la intendente de Federal, Alicia Oviedo, quien destacó la «generosidad de las autoridades de la Fiesta del Chamamé de Corrientes de visitarnos y compartir inquietudes y proyectos con la fiesta de Federal». Asimismo, ambas autoridades aseguraron que este es el inicio de un proyecto ambicioso que busca posicionar aún más a la cultura chamamecera.
Corazón festivalero
El imponente predio festivalero, que tiene una extensión de dos hectáreas, abrazó en sus noches chamameceras a una multitud que cantó, bailó y expresó sus sentimientos en los sapukái. El viernes, en la noche inaugural, el «Corazón chamamecero», lema del festival, sintió los latidos correntinos de artistas como Manuel Cruz que junto a su cuarteto Estampa Correntina hizo honor al escenario Ernesto Montiel con un homenaje musical. La destacada voz de Florencia de Pompert tiñó en chamamé las postales correntinas.
La segunda noche también sintió la magia del «payé» en los pagos entrerrianos. Uno de los que convirtió el escenario en un «refugio de soñadores» fue Rudi Flores, quien compartió escenario con el talentoso joven acordeonista, Nicolas Cardozo. Juntos soltaron al vuelo obras como «La Calandria», «General Madariaga» y «Soñé que estaba contigo». El público quedó admirado y nos lo dejó irse sin la versión maravillosa de «Kilómetro 11», con arreglos de su hermano, Nini Flores, que lo interpretó perfectamente su exalumno, Nicolas Cardozo. Y como «yapa», regalaron la polca «Colorado».
Curuzucuateños
Con la hermandad como bandera, Federal y Curuzú Cuatiá tienen una relación especial por su cercanía. Es así que cada artista curuzucuateño es muy bien recibido.
Uno de ellos fue Antonio Tarragó Ros, quien roció de nostalgia la medianoche del sábado. De su cantera de obras, ensilló temas como «Jineteando la vida» y «El toro».
Además, invitó a un intelectual y no vidente chamamecero de Entre Ríos, Fabián Galagarra, para compartir «Merceditas». El momento más emotivo fue cuando visualizó en la platea a su histórico albañil, Salvador Vargas, personaje que inspiró a componer la maravillosa obra junto a Teresa Parodi, «Cielo del Albañil». Claramente su interpretación hizo lagrimear a más de uno y en especial a «Varguitas», como le dice Ros.
Parte del show fue la donación de un triciclo antiguo a la organización que perteneció a su papá y estrenó «Arroyo Ma chuca», que interpretó junto al músico local, Tolato Tzruskot. Se despidió de Federal con «Don Gualberto» y «Caraicho».
Esa misma noche, la bailanta se multiplicó con el solo anuncio de Juancito Güenaga. Y es que cada vez que se acerca el momento de su presentación los bailarines se disponen para no desperdiciar el momento de la presentación de este curuzucuateño.
Su hermano, Jorge Güenaga, aunque con un estilo muy diferente también fue de la partida. Con su «Cuarteto Litoral» en la jornada de cierre repartió clásicos montieleros. Saludó así con «Gente de ley», «A Bella Vista», «Llanto del saucedal», entre otros. «Cómo venir a estos pagos y no tocar para esta hermosa gente», dijo el músico e interpretó «Pa la paisanada».
Chamamé con payé
Una de las sorpresas de la edición fue la presentación del grupo Irundy. Tras su tradicional saludo «Madrecita», los versos sacudieron el anfiteatro para esparcir bailarines por doquier con el clásico «Levantando el avispero».
La gran bailanta impresionó y no es para menos, tal su apodo «Tzunami del chamamé», el enorme predio se cubrió de polvo entre zapateos y sapukái.
Con «El gateao», dedicaron en los versos de Matias Niella a los enamorados frustrados; «como se fue esa Itateña», para enganchar ahí nomás el «Gato Moro», «Zapateando» y «Paso Laguna», entre tantos.
Con un invitado especial, el músico exintegrante del grupo y además actual intendente de Concordia, Francisco Azucué. Juntos interpretaron «El tirabuzón» y «Campo en llamas». Para el final, el grupo, que además de Niella, tiene a Santiago Giuceppe, Juan Pedro Sorribes, Ivan Playuk, Dante Aranda, y Martín Rodríguez, se despidieron con el «Kilómetro 11» a ritmo acelerado que hizo bailar a Federal.
Otro de los destacados fue Sangre Paiubrera, que cumpliendo 20 años de trayectoria, compartió temas como «Andresito», «Bajo el cielo de Mantilla» y unos versos en homenaje al ferroviario. Se despidió con el himno «Adiós ciudad de Mercedes».
Lo propio hizo Diego Gutiérrez que tras su «intro» regaló su obra «Sagua á», «Soy de Itá Ibaté» y «Muchacha del interior». Con Tolato Trucosk como invitado, tocó «La calandria» y «Kilómetro 11» interpretado a la vez en su bandoneón, un tema en cada mano. Se despidió con el acordeón con «Laguna totora», en una brillante presentación. Federal quedó satisfecha con las presencias correntinas y dijo hasta la edición 50, del 1 al 9 de febrero de 2025
.(Fuente: diarioepoca.com)