El hecho ocurrió en la ciudad de Colón, Entre Ríos, donde la justicia determinó la “eliminación definitiva” de una cuenta de Facebook a través de la que acosaban a diferentes personas y, en este caso, amenazaron a una docente.
En diálogo con nuestra redacción, el Dr. Martín Jauregui, abogado querellante en la causa, explicó que “la cuenta de Facebook se cierra porque fue el medio utilizado para concretar una amenaza contra una docente”, para la que “logramos acreditar, con la verosimilitud del derecho, que surgió de esa IP, en esa cuenta y, como medida autosatisfactiva, pedimos su eliminación a los fines de evitar la consumación de nuevos ilícitos”, algo que consideró como “innovador e importante”.
La audiencia tuvo lugar en el Juzgado de Garantías de Colón, a cargo de la Dra. Natalia L. Céspedes en legajo N° 2574/21, donde se sustanció una audiencia a pedido de la querella a cargo del Dr. Martín Jauregui, con participación de la Fiscal Micaela Di Pretoro. Allí, la magistrada resolvió hacer lugar al pedido de la querella y ordenar a Facebook Inc. la eliminación definitiva de la cuenta en cuestión.
Amenazas y delitos
El Dr, Jauregui, a cargo de la querella que motivó esta medida, explicó que “este es un caso en el que, a través de esa cuenta de Facebook y en forma anónima, agraviaban a múltiples ciudadanos de Colón y, en algunos casos, amenazaban con fines políticos, en su mayoría” debido a una “disputa entre dos facciones”.
Precisamente, había dos perfiles en cuestión, uno que “se llamaba Ramona Lima y otro que se llamaba Ramón Lima; dos perfiles truchos a través de los cuales se concretaban todo tipo de agravios y, eventualmente, delitos”.
No obstante, el abogado querellante destacó que “no había manera judicial de parar esto” a pesar de que “la gente llegaba a tener depresiones y estaba al borde del suicidio, porque eran dos páginas muy visitadas en la zona justamente por eso”.
Hasta entonces, reconoció que “todo el mundo venía haciendo denuncias, pero no había manera porque no le podían entrar dado que nos enfrentábamos a un delito de acción privada como es injuria y calumnia, nunca nadie lo encaró por el lado de la amenaza”.
Es debido a esto que lo consideró como “un avance, porque además de haber concretado la imputación, la apertura de la causa, logramos algo que no se hubiera podido lograr nunca por otra vía” e “introducimos en el fuero penal una medida autosatisfactiva de carácter preventivo, que tiende a interrumpir los efectos del delito”, puntualizó. (Diario Río Uruguay)