El legislador reconoció que está en contra del «sistema» y asegura que donó lo que cobró al Hospital Garraham. Lilita es la diputada que más boletos canjeó en los últimos tres años.
La Cámara de Diputados estuvo en el centro de las noticias esta semana, al difundirse la lista de legisladores que más pasajes aéreos y terrestres canjearon, para incorporar a sus dietas el dinero que les corresponde por traslados. Fernando Iglesias, quien había canjeado 105 mil pesos por los últimos tres meses en concepto de viajes, reconoció estar en contra del sistema y se comprometió a «hacer todo lo posible para cambiarlo».
La práctica de canjear por dinero los pasajes de los viajes no realizados es legal, viene de hace años y se extiende a legisladores de todos los partidos, que usan los fondos para complementar sus salarios o los de sus asesores. Las principales críticas se extienden a dirigentes de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, que participan en el canje aunque no necesiten realizar traslados de media o larga distancia para llegar al Congreso. Sin embargo, cada diputado posee 20 pasajes aéreos y 20 pasajes terrestres por mes en su poder, lo que les permite inflar su dieta hasta con 40 mil pesos más; es decir, un 45% más de su sueldo.
En diálogo telefónico con PERFIL, Iglesias aseguró luego de la polémica que se generó por los 105 mil pesos que canjeó, donó el dinero al Hospital Garraham. Además, contó que envió una carta al Presidente de la Cámara de Diputados Emilio Monzó para que «no se deposite ni pague más el canje de pasajes. Y ya está».
El diputado de Cambiemos sostuvo que «hace bastante que vengo quejándome del sistema y estoy haciendo todo lo posible para que se cambie». Sin ir más lejos, su Twitter en 2011 refleja el mismo pensamiento: «Mi dieta del último mes fue de 12.846$ neto. Y por canje de pasajes (vergonzoso salario en negro) recibí 11.240$». De todos modos, vale destacar que el canje de pasajes se debe solicitar a través de un trámite, no es un acreditación automática.
Polémica con destino a Nueva York. Iglesias fue cuestionado además por un viaje que realizó a Estados Unidos, con un pasaje cuya financiación fue poco clara. «Al principio me confundí y dije que lo había pagado una ONG porque antes, cuando no era diputado, conseguía que me los financiaran, pero luego de que los asesores me sugirieran que podría ser considerado una dádiva si el viaje era para desempeñar mis funciones, cambié el hábito y ese pasaje me lo pagué yo», aclaró a este portal.
Cuando publicó en un principio su pasaje, no quedaba claro el gasto porque figuraba un gasto de 6 mil pesos a American Airlines en una fecha posterior a la de su viaje en cuestión, lo que empeoró las críticas al diputado. «Volví a equivocarme. Lo que pasó es que yo tuve que cambiar el horario del pasaje para llegar a escuchar a Macri en la apertura de sesiones y esos 6 mil pesos son la multa». «Eso explica que la fecha del pago es durante mi estadía allá», argumentó.
Luego advirtió que ya publicó en sus redes el pasaje con el recibo de la tarjeta que comprueba que lo pagó de su bolsillo.
Lilita polémica. Quien no se salva del caso es Elisa Carrió, que según reveló Infobae, es la que más viajes canjeó en 2015, 2016 y 2017, acumulando un total de $860.400.
Desde la Cámara argumentan que los legisladores de la provincia de Buenos Aires y su capital necesitan los pasajes para viajar y conocer las problemáticas del país que después se votan en el recinto. Pero en algunos casos, como el de Carrió, no se pasó ningún pasaje al Congreso pero sí el canje de su monto.
«Yo viajo en clase turista y me los pago yo no pido pasajes al Congreso como si lo hace el resto. Tengo la lista de los viajeros, no mientan», publicaba Carrió en 2015. No obstante, fue quien más canjes de pasajes realizó en los últimos tres años.